Habrá una representación en el Teatro Mira de Amescua el 13 de mayo a las ocho de la tarde
La Asociación Cultural Sulayr Teatro presenta en Guadix el próximo 13 de mayo la obra “1492. Expulsión de los judíos. Carta de Isaac Abravanel”. Una producción de Ángel Navarro con guion de Isabel Sánchez Ballesteros y la dirección de Oren Moreno. Habrá una única representación ese día en el Teatro Mira de Amescua a partir de las ocho de la tarde. Las entradas estarán disponibles en el área municipal de Cultura del Ayuntamiento de Guadix a partir de la semana próxima a un precio de cinco euros. También se podrán adquirir en la propia Asociación Cultural Sulayr. Y el mismo día de la representación en la taquilla del Teatro desde una hora antes de su inicio.
Tal y como explican los
responsables de la propia Asociación, este montaje propone una recreación
histórica del famoso “Decreto de Expulsión de los Judíos” promulgado en el
Salón de Comares de la Alhambra de Granada por los Reyes Católicos. El pasado 31
de marzo se conmemoró el 525 aniversario de este acontecimiento que proponía la
expulsión del pueblo judío. El espectáculo trata las graves consecuencias que
propició el Decreto y los daños morales infligidos a la comunidad judía, “que produjeron
dramáticas consecuencias económicas, sociales y religiosas en la historia de
España”.
“En esta dramatización se
muestran las opiniones, decisiones y prejuicios de los personajes principales.
Y además podremos escuchar, en el clímax del montaje escénico, la réplica del
pueblo judío a través de la carta de Isaac Abravanel. La fuerza de las palabras
escritas interpelan al poder real y a sus asesores con la contundencia y el
vigor de quienes lo han perdido todo y ya no tienen nada que temer”, añaden.
La trama la desarrollan los
personajes de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón, Beatriz de Bobadilla y
Andrés de Cabrera, Fray Hernando de Talavera y Fray Tomás de Torquemada y los
judíos protagonistas Isaac Abravanel, comerciante y teólogo, y Abraham Senior,
Rabino Mayor de los judíos y Contador Mayor de los RR. Católicos.
Sefarad se imaginará al
final de la obra, con la ayuda de una cuidada interpretación musical en
directo, como una tierra amada a la que añorarán y cantarán como un paraíso
perdido o arrebatado desde su exilio. “La puesta en escena enciende las alarmas
frente a la intolerancia de todo tipo que la historia no deja de revelarnos
como un espejo de la injusticia y el abuso de poder y desde aquí defendemos el
respeto a las diferentes culturas, religiones y opiniones que pueden convivir
en nuestra tierra”, terminan los responsables del espectáculo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario