Granada

GRANADA

“Todas las ciudades tienen encanto, Granada el suyo y el de todas las demás”

Antonio Machado

“si tuviésemos que visitar una sola ciudad en España, esa debería ser Granada”

Ernest Hemingway

“ Por el agua de Granada solo reman los suspiros”

Federico García Lorca

         Después de los elogios dedicados a Granada por grandes personajes de la historia, poco se puede decir, pero intentaremos aportar nuestro granito de arena.

         La fértil Vega del Darro y del Genil , enmarcada por las tres pequeñas colinas, el Albaicín y el Sacro monte sirve de emplazamiento a Granada, habitada desde el s. V a.c

HISTORIA

       Denominada illiberis en época romana, Granada alcanzó su máximo esplendor tras la caída del Califato de Córdoba ( s.XI. ), cuando pasó a ser capital de un pequeño reino de Taifas.

            En el s. XII estuvo bajo el dominio de los almohades. A lo largo de los siglos  XIV y XV, el reino Nazarí de Granada, convertido en el último bastión árabe en la Península Ibérica, hizo gala de un refinamiento estético, un lujo y una riqueza cultural inusitados. Sin embargo, el brillo cultural y social no lograba ocultar una decadencia política que se manifestaba también en las divisiones internas de los nazaríes. Aprovechándose de estas disensiones, los Reyes Católicos prepararon, a fines del s. XV, la ofensiva final contra el reino de Granada.  Poco a poco fueron cayendo ciudades importantes del Reino: Málaga, Ronda, Loja, Guadix, Baza, Almería, etc. El 2 de enero de 1492, los Reyes Católicos, entraron en Granada, y recibieron las llaves de la ciudad de manos de Boabdil. El último rey musulmán de Granada que partió hacia el exilio. Cuenta la tradición que cuando camino de Motril, Boabdil contemplaba por última vez la ciudad, tuvo que escuchar de labios de su madre: “llora como mujer lo que no supiste defender como hombre”. Este episodio, que se desarrolló en el lugar conocido como Suspiro del Moro, puso fin a 781 años de presencia musulmana en la Península Ibérica.

MONUMENTOS DE GRANADA

            LA ALHAMBRA, es sin duda, el monumento por antonomasia de Granada, es un palacio fortificado construido en piedra rojiza, de ahí el nombre de “calat Alhambra”, palacio rojo. El conjunto arquitectónico de la Alhambra se alza al noreste de la ciudad, sobre la colina de la Sabika. Los edificios más lujosos se construyeron durante los reinados de Yusuf I ( 1333- 1354 ) y de Mohammed V ( 1354- 1391 ).

            La Alcazaba es anterior, se edificó por orden de Mohammed I, el fundador de la dinastía Nazarí, en 1238. Detrás de la puerta de las Granadas, construida por Pedro Machuca en tiempos de Carlos V y decorada con tres granadas, se extiende el bosque que separa la ciudad del recinto fortificado. Se accede a él por la imponente Puerta de la Justicia, con sus bellos azulejos azules y verdes, abierta en una de las torres que jalonan las murallas. La visita comienza por la Plaza de los Aljibes, desde donde se entra por la Puerta del Vino ( s. XIV ). Frente a ella se extienden las antiguas dependencias de la alcazaba, coronadas por la Torre de la Vela, de 26 m. de altura, desde donde se divisa una magnífica panorámica: La Alhambra y el Generalife, los barrios del Albaicín y el Sacromonte, el casco urbano de Granada y el Castillo de Torres Bermejas del s.XII.

            El palacio árabe, corazón de la Alhambra, se divide en los tres recintos típicos de todos los palacios árabes: las dependencias del Mexuar, destinadas a la administración de justicia; las estancias del patio de los Arrayanes, con el salón del trono, dedicadas a los asuntos oficiales; y por último las dependencias del patio de los Leones, que constituían la residencia privada del monarca.

El Palacio árabe de la Alhambra es una joya arquitectónica de valor incalculable, por su extraordinaria riqueza decorativa y su perfecto ensamblaje con la naturaleza, mediante la incorporación del agua a los elementos decorativos, y la proliferación de miradores que abren los recintos al paisaje natural. La visita al palacio empieza por el Mexuar. El patio del Mexuar, pavimentado en mármol, comunica con el Cuarto Dorado a través de 3 arcos. Se pasa a continuación al patio de los Arrayanes, constituido por un largo estanque jalonado de mirtos. Al norte de este patio, una hermosa arquería introduce en la torre de Comares, que comprende la Sala de la Barca, con lujoso artesonado en madera de cedro, y el salón de embajadores o del trono, donde tenían lugar las grandes recepciones.

A través de una pequeña puerta con arco de herradura se accede desde el patio de los Arrayanes a la sala de los Mocárabes y al patio de los Leones. Graciosas arquerías apoyadas en un total de 124 columnas de mármol circundan  este patio, cuyo nombre se debe a los doce leones que sostienen la fuente situada en el centro. La sala de los Abencerrajes está cubierta por una bellísima cúpula estrellada de mocárabes. La sala de los Reyes esta subdivida en tres recintos. 

 Una de las estancias más bellas del palacio es la sala de las dos Hermanas, con dos losas de gemelas de mármol en su pavimento, que son las que le han dado nombre, y una fuente central: cubre la sala una cúpula de mocárabes, con más de 5000 concavidades; en el alicatado de las paredes, un poema de Ibn Zamrak, visir de Mohammed V, describe la estancia y canta las loas del emir. Desde allí se pasa a la sala de los Aljimeces, con sus encantadoras ventanas gemelas y al mirador de Daraxa, cuyas ventanas de grandes arcos, permiten contemplar los cipreses, limoneros y naranjos del recoleto jardín de Daraxa. Finalizada la visita a las dependencias del palacio árabe, se sale a los jardines del Partal, que se extienden en terrazas ante la torre de las Damas, precedida por un bello pórtico y de una alberca rectangular.

            Desde los jardines del Partal se entra en el jardín de Daraxa para llegar a los departamentos de Carlos V,  al patio de la Reja, al peinador de la Reina, en la torre del mismo nombre, y a los baños, decorados con azulejos y estucos pintados. Entre las numerosas torres que jalonan las murallas árabes cabe destacar la torre del Mihrab, la torre de los Picos, almenada, la torre del Candil, y muy especialmente las torres de la Cautiva y de las Infantas, lujosamente decoradas.

EL GENERALIFE, el palacio de verano de los reyes árabes de Granada. Los agradables paseos de los cipreses y de las adelfas conducen al Yen-Nat-Al- Arif ( nombre árabe del Generalife ) o “ Jardín del Arquitecto”. Se trata de dos pabellones separados por el sugestivo patio de la Acequia. Los edificios están rodeados de esplendidos jardines con numerosas fuentes y surtidores.

            También forma parte del conjunto de la Alhambra La IGLESIA DE SANTA MARÍA ( s. XVI ), de Juan de Herrera, el antiguo CONVENTO DE SAN FRANCISCO ( 1495;) hoy parador Nacional de Turismo, y el PALACIO DE CARLOS V, iniciado en 1526 por Pedro Machuca. Es un edificio muy sobrio, de estilo renacentista, cuya planta consiste en un círculo inscrito en un cuadrado. En el centro del palacio se abre un gran patio circular, de 31 m. de diámetro, con dos galerías superpuestas. Alberga el Museo Hispano- Musulmán y el Museo provincial de Bellas Artes.

            LA CATEDRAL  Enrique Egas inició la construcción en 1523 y la continuó Diego de Siloé, quien abandonó el estilo gótico de su predecesor para trabajar en estilo renacentista. El interior está dividido en 5 naves. Entre las numerosas obras de arte que embellecen el templo sobresalen 14 vidrieras flamencas( s. XVI ); las figuras orantes de los Reyes Católicos, de Pedro de Mena; y los medallones monumentales con los bustos de Adán y Eva, obra de Alonso Cano.

            Anexa a la catedral, pero con entrada independiente, está la CAPILLA REAL, construida entre 1506 y 1521 en estilo gótico florido, según un proyecto de Enrique Egas.  En su interior decorado en estilo isabelino y repleto de obras de arte, se encuentran los sepulcros de los Reyes Católicos, y los de Juana “la loca” y Felipe “el hermoso”. Una magnífica reja ( 1518 ) de Bartolomé de Jaén cierra el recinto sepulcral propiamente dicho. El altar mayor está decorado con esplendidos relieves de Felipe de Borgoña que representan, entre otras cosas, escenas de la toma de Granada.

            Las estatuas orantes de los Reyes Católicos situadas a la derecha y a la izquierda del altar se deben a Diego de Siloé. La sacristía contiene obras de arte de gran valor.

            En las proximidades de la catedral se encuentra la ALCAICERÍA, el antiguo mercado de la seda, reconstruido a mediados del s. XIX con todos los detalles del original, y que constituye  actualmente un verdadero “Zoco” de souvenirs. En la calle de Mariana Pineda está el Corral del Carbón ( s. XIV ), que fue en sus orígenes una alhóndiga, de hecho la mejor conservada de la Península Ibérica, fue transformado después en teatro. Debe su nombre al hecho de que en el s. XVII se instaló allí el peso del carbón. Arcos de herradura de ladrillo con una inscripción en caracteres cúficos dan paso a un vestíbulo decorado con mocárabes ( techo en forma de estalactitas ), desde donde se accede al patio central porticado con sus tres galerías superpuestas.

            PLAZA NUEVA  es un magnífico punto de partida para un recorrido por los pintorescos barrios del Albaicín y la Alcazaba Cadima, que se extienden sobre las vertientes de una colina. Son los barrios que mejor conservan los vestigios de los antiguos habitantes de la ciudad: los árabes. En sus estrechas calles de casas encaladas existen antiguas casas moras, palacios y restos de mezquitas, así como encantadores jardines en flor y rincones en los que el tiempo parece haberse tenido en la época árabe.

           

MONASTERIO DE LA CARTUJA,  las obras de su construcción comenzaron en 1506. En la iglesia  reviste gran interés el Sancta Sanctorum, un camarín circular que puede verse a través de un gran óculo de vidrio; con su exuberante decoración constituye una de las expresiones más interesantes del barroco español. No podemos perdernos: la sacristía, el claustro, la sala capitular y el refectorio.

            BAÑOS ÁRABES, del s. XI, se hallan entre las instalaciones  de este tipo mejor  conservadas. Entre sus elementos decorativos se hallan, capiteles románicos, visigodos y propiamente árabes que, sobre columnas de mármol sostienen arcos de herradura. 

            CASA DE LOS TIROS, fue construida entre 1530 y 1540, recibe su nombre por los cañones que asoman entre sus almenas. Destaca el artesonado policromado de la “ Cuadra Dorada” ó salón principal. En 1921 el Museo Casa de los Tiros pasó a ser propiedad del estado y desde entonces alberga la biblioteca y hemeroteca sobre temas granadinos.

            IGLESIA DE SANTO DOMINGO, comenzó a construirse  en 1512, ofrece a la vista un hermoso pórtico de 3 arcadas. Es una de las edificaciones más importantes de Granada por la gran variedad de estilos que alberga.

            IGLESIA DE SAN JERÓNIMO,  Fue el primer monasterio construido en la ciudad tras la toma por los Reyes Católicos, es donde está enterrado Gonzalo Fernández de Córdoba, “el Gran Capitán”.

            HOSPITAL DE SAN JUAN DE DIOS, posee un magnífico patio renacentista y una escalera monumental de la época.

            HOSPITAL REAL, se trata de un imponente edificio con unos admirables artesonados de realización mudéjar.

           

PUERTA ó ARCO DE ELVIRA, una de las más importante de la muralla árabe, data del s. XI con sucesivas ampliaciones en el s. XIV. Tuvo gran importancia como puesto militar y aduana.

            CASA DE CASTRIL,  palacio renacentista, sede del Museo Arqueológico y Etnológico de Granada.

            MONASTERIO DE SANTA ISABEL LA REAL,  Está situado en el alto Albaicín, el monasterio engloba el palacio árabe de Dar Al Horra. Fue fundado por Isabel la Católica.